El relleno con ácido hialurónico es uno de los tratamientos no quirúrgicos más populares en el mundo de la estética. Este procedimiento está diseñado para restaurar el volumen perdido, suavizar líneas de expresión y mejorar la hidratación de la piel. El Dr. Isaac Somohano, cirujano plástico certificado por el Consejo Mexicano de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva (CMCPER), ofrece este tratamiento en San Luis Potosí, ayudando a sus pacientes a lograr una apariencia más rejuvenecida de manera segura y efectiva.
El ácido hialurónico es una sustancia natural presente en nuestro cuerpo que tiene la capacidad de atraer y retener grandes cantidades de agua, proporcionando volumen y manteniendo la piel hidratada. Con el paso del tiempo, la producción natural de ácido hialurónico disminuye, lo que provoca la aparición de líneas de expresión y pérdida de volumen. Los rellenos con ácido hialurónico pueden revertir estos signos de envejecimiento de forma segura y eficaz.
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El ácido hialurónico es una sustancia que se encuentra de forma natural en la piel y que atrae y retiene agua, proporcionando hidratación y volumen. En los tratamientos estéticos, se utiliza para rellenar arrugas, restaurar el volumen en ciertas áreas del rostro y mejorar la apariencia general de la piel.
Los resultados de los rellenos con ácido hialurónico son temporales, pero generalmente duran entre 6 y 18 meses, dependiendo del área tratada, el tipo de relleno utilizado y las características individuales de cada paciente.
El tratamiento suele ser mínimamente doloroso. Se utiliza anestesia tópica o en algunos casos se inyecta un anestésico local para minimizar cualquier molestia. La mayoría de los pacientes describen el procedimiento como rápido y relativamente indoloro.
El ácido hialurónico es versátil y se puede utilizar en varias áreas del rostro, incluyendo labios, pómulos, ojeras, líneas de marioneta, surcos nasogenianos (líneas alrededor de la boca) y líneas de expresión en la frente.
Después del tratamiento, puedes experimentar hinchazón o pequeños hematomas en el área tratada, pero estos efectos secundarios suelen desaparecer en unos pocos días. No es necesario tiempo de recuperación, y puedes retomar tus actividades diarias de inmediato.
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